Myanmar, amargas sonrisas.

Ya estamos de nuevo en Bangkok y tenemos mas contacto con el mundo. Las 3 semanas que hemos pasado en Myanmar han sido geniales, pero tambien nos hemos sentido tristes por la dura vida de los birmanos. Sobre todo por lo simpaticos que son. Caminas por la calle, por una ciudad, por un pueblo, por los arrozales, viajas en barca por el lago Inle... y siempre recibes una sonrisa de los locales. Nunca he estado en un pais donde la gente sonria tanto a los turistas. Y claro, pensar que son tan pobres y que sufren una dictadura horrible te entristece.

En la antigua Birmania, hoy Myanmar, nos hemos encontrado con otros mochileros viajando como nosotros: Giuliana y Paula, dos mexicanas con las que hemos compartido habitacion, bus, cerveza y camara de fotos; Francesco, un italiano con el que acabamos de desayunar en Bangkok; Tom, un australiano que nos acompaño en los ultimos 5 dias por el pais; una pareja de Vic con los que estuvimos menos de una hora pero que nos contaron historias muy interesantes de una ONG en Burkina Fasso con la que colaboraron. Pero lo que me ha sorprendido bastante ha sido encontrarme con tanto español viajando por aqui. Solamente en el avion de Bangkok a Yangon pudimos ver a 4 españoles, y luego a otros mas por otros lugares del pais. Ademas, no todos viajaban en paquetes organizados, cosa rara para ser españoles...

Y hablando de paquetes organizados, ya nos habiamos informado de como se puede viajar por esta dictadura: o lo haces por libre o contratas un paquete que tiene que pasar por las corruptas manos de los generales que dominan con mano de hierro cualquier gran negocio en este pais. Si viajas por libre tienes que sufrir las incomodidades de buscar por tu cuenta transporte, alojamiento, actividades, comida, etc. O sea, como en cualquier lugar del mundo. Ademas, para mi eso forma parte del viaje. Si viajas con todo organizado no hay forma de escapar de los hoteles gubernamentales, con guias que te llevan por donde ellos quieren, te enseñan lo que ellos quieren y no oyes mas que lo que los tiranos quieren que oigas. En pocos paises como este ves una realidad tan irreal. Ademas, oimos que una pareja de españoles habian hecho un trekking de tres dias contratado desde España que les costo mas de 400 $ por persona. Nosotros y las personas que nos lo contaron hicimos el mismo trekking, durmiendo en los mismos sitios, comiendo la misma comida y viendo los mismos arrozales por 36 $. Pero lo mas triste de todo es que de nuestro dinero seguramente algun pequeño porcentaje va a parar a las arcas de los generales, pero de los 400 $ casi nada va a parar a la gente, todo para los dictadores, como todo lo que se contrata a traves de los organismos oficiales birmano.

Nuestra ruta por el pais empezo en Yangon, una caotica ciudad que parece recien bombardeada y que nos hizo irnos cuanto antes a respirar aire puro hacia las montañas. Estuvimos unos dias en el simpatico pueblo de Kalaw, base para los trekkings al lago Inle, una especie de albufera donde los pescadores reman con los pies y los agricultores tienen campos flotantes de tomates. Despues fuimos a la antigua capital, Mandalay, algo menos caotica que Yangon pero con un trafico de locos, no por masivo sino porque nadie respeta las mas esenciales normas de circulacion (cruzar la calle esta considerado deporte de alto riesgo). Unos dias en Hsipaw, al noreste de Mandalay nos sirvieron para disfrutar de la vida rural de la zona: campos, aldeas de casas de bambu, caminos enfangados por los que las bicis que habiamos alquilado se atascaban cada dos por tres, e incluso una especie de celebracion budista-animista en un templo al que nos invitaron para ver sus rezos, tomar cafe y cacahuetes, aunque nadie hablaba ni una palabra en ingles. Poco a poco volvimos a Mandalay y fuimos hacia el sur hasta Bagan, una zona plagada de stupas (una especie de templos budistas), algo mas turistica, cosa que se notaba en la cantidad de vendedores de todo que se te acercaban con sus perennes sonrisas. De alli fuimos a Bago, otra zona de templos en la que tanto Buda nos hizo tomarnos con mas calma los paseos. Y los ultimos dias en Yangon los dedicamos a hacer una excursion de un dia a un par de pueblecitos del delta del rio Ayeyarwady, a buscar donde ver algun partido del mundial de futbol y a esperar nuestro vuelo de vuelta a Bangkok.

Hay un debate abierto sobre si ir a Myanmar o no, ya que dicen que ir al pais es de alguna manera apoyar a la dictadura. No ir representa continuar con el boicot a unos tiranos que gobiernan un pais con decisiones locas, como la de construir una nueva capital de la noche a la mañana por decision del astrologo personal del general Than Shwe, lider de los tiranos. Pero con un poco de informacion (Lonely Planet) y dos dedos de frente se puede reducir mucho lo que recibiran las arcas gubernamentales. Por ejemplo, todo lo que contrates via las oficinas de turismo esta gestionado por el gobierno, con lo que hay que buscarse la vida con guias locales y hoteles familiares, que los hay y muchos; las cervezas Myanmar y Dagon son propiedad del gobierno, asi que a beber otras marcas; los vuelos internos y los trenes tambien estan controlados por el gobierno, pero viajar en buses privados es mas rapido y casi siempre mas comodo (el tren hay zonas en las que no puede pasar de 25 km/h o descarrila!); y sobre todo hablar con los locales te hace aprender mucho sobre como moverte por el pais dejando tus turisticos dolares en manos de la gente, que en muchos casos viven con un euro al dia.

Asi que personalmente creo que vale la pena ir, pero por libre. Parte de la aventura es llegar a un pueblecito e ir preguntando donde hay un hotel o como ir a la atraccion de turno. Pero esto es asi en Myanmar, en el resto del sudeste asiatico y en todo el mundo. Si quereis algo diferente mejor ir a Marina d'Or o a Corea del Norte.

Marina d'Or no, pero Corea del Norte me atrae...

Atascados en Malasia

Se acabo el buceo y volvemos a viajar. Es un cambio grande el no tener tareas ni horarios establecidos pero tener que hojear la Lonely Planet para escoger un destino, hotel, medio de transporte, restaurante... La vida del viajero es muy dura!

Ya hacia tiempo que habiamos comprado el vuelo Tawau (Borneo), Kuala Lumpur, Bangkok con la idea de tramitar el visado de Myanmar en la capital tailandesa, casi el unico sitio del mundo con conexion aerea con Yangon. Pero poco a poco las noticias de manifestaciones en Bangkok nos empezaron a preocupar, sobre todo al leer que el numero de muertos se acercaba al centenar y el toque de queda se iba alargando. Asi que tras varias vueltas de mostrador en mostrador de Malaysian Airlines conseguimos que cambiaran el tramo Kuala Lumpur-Bangkok para seis dias mas tarde, con lo que teniamos tiempo de tramitar el visado de Myanmar en KL. Con ello el problema era: que hacemos ahora en KL?

Motos, coches, viejos autobuses humeantes, otros bastante nuevos pero con cortinas estilo indio llenas de colores, autopistas, callejones, semaforos para peatones que no funcionan, parques, banderas malayas por doquier, KFC's, McDonald's, Pizza Hut's, Starbucks, restaurantes chinos, malayos, indios, portugueses/malayos, puestos callejeros constantemente friendo arroz y fideos, Andy y Sergi quejandose en un restaurante porque tienen sopa de aleta de tiburon en el menu, tiendas de relojes, de fotos, de moviles, de DVD's piratas, de bolsos, gafas, cinturones, ropa... de las mejores marcas y por supuesto todo de imitacion, basura, charcos, baches, agujeros en las aceras que te llevan el abismo de las alcantarillas malayas, chiringuitos de venta de fruta dificil de comer y con nombres imposibles de recordar, templos chinos, budistas, mezquitas, alguna iglesia que da la impresion que esta fuera de lugar, casas destartaladas, estaciones de tren que no han visto pintura en sus paredes en decadas, centros comerciales, rascacielos, las imponentes torres Petronas, malolientes lavabos publicos de pago, calles atestadas de hombres fumando, mujeres con velo, otras con burka, adolescentes con piercings pegados al movil, mochileros buscando hostal, turistas singapurienses, chinos, japoneses y coreanos sacando fotos de cualquier piedra, parejas de treintañeros centroeuropeos viajando con un bebe a los hombros, buscavidas, carteristas, policia religiosa, mendigos, yuppies halal, olor de fritangas, de pastelerias, de aguas fecales, de sudor, de incienso, de flores, de lluvia, de tubo de escape, tren, monorail, metro automatico sin conductor, calor, humedad, lluvias torrenciales, rayos, truenos y centellas. Todo eso y mas es Kuala Lumpur. Una ciudad barata para nosotros pero cara comparada con el resto de SE Asia y con poco que ofrecer a estos dos trotamundos que ya estan mas de un año viajando.

Asi que decidimos escaparnos de KL e irnos el fin de semana a Malacca, 144 km al sur de la capital malaya, un destino turistico pero con buena comida, cosa que echabamos de menos al estar dos meses en Semporna. Ademas, al ser un puerto muy importante para los colonizadores portugueses, holandeses y britanicos conserva algunos edificios antiguos frente a los que las hordas de turistas asiaticos sacan innumerables fotos posando con sonrisa Profiden. La pregunta es: que hacen despues con tanta foto? Porque no paran! Que ven una casa del siglo XIX? Foto. Una replica de un barco portugues del siglo XVI? Foto. Una piedra en el suelo sin importancia? Foto. Pasa una mosca? Foto.

Lo mas impresionante que vimos en Malacca fue al Dr. Coconut Kung Fu. Se trata de un señor que dice ser doctor, parece ser que experto en artes marciales, ya entrado en los sesenta pero en muy buena forma. Su espectaculo callejero consiste en abrir cocos con el dedo indice. Alguna vez habeis probado a abrir un coco? Yo si, y con la ayuda de un machete me costo lo suyo. Pues este señor los abre con un buen golpe de su dedo indice. Ahora si, despues de abrir el coco se le hincha el dedo que no veas, y la gracia es que se pone en el dedo un aceite "milagroso" que le rebaja el hinchazon y dice que el tremendo dolor en un par de minutos. Claro, el aceite lo vende a unos 2,5 euros la botella y es todo un exito. Yo tuve la suerte de ser elegido para ayudarle a elegir un coco y me regalo una de las botellas. No, no me lo he puesto en ningun sitio para rebajar ningun hinchazon.

Lunes por la mañana, Kuala Lumpur. Afortunadamente no nos cuesta mucho encontrar la embajada de Myanmar. Esperamos a que abran en un mostrador viejo con sacos llenos de tierra delante estilo barricada militar. Curiosamente, la señora que nos atiende nos dice que es muy facil entrar al pais (aunque solo por aire y en Yangon) y que el visado lo tramitan inmediatamente en el aeropuerto previo pago de 20 dolares USA. Estara empezando a cambiar algo en este cerrado pais?

El resto de la estancia en KL la pasamos caminando por sus calles, visitando algun museo que no son nada especial (standard SE Asia...), viajando en buses urbanos y sorprendiendonos con el metro sin conductor. Da un poco de noseque estar a primera fila y ver el tunel delante de ti sin nadie fisicamente en el tren que lo dirija! Y lo mas espectacular de KL son las Torres Petronas, dos moles gemelas de acero y hormigon que en su dia fueron las mas altas del mundo con 451.9 metros hasta que las sobrepaso una torre en Taipei y que representan el poderio de la empresa estatal de petroleo y el despulfarro de un pais que quiere ser rico, poderoso y desarrollado pero que aun le falta mucho para considerar que sus habitantes viven bien. Nos hicimos las fotos de rigor en la base pero no pudimos subir al haberse agotado los tickets. Bueno, tampoco se puede subir mas alto del piso 42, donde hay un puente que las une a 170 metros de altura.

El dia 2 aterrizabamos en Bangkok donde no esperabamos hacer demasiado turismo, ya que nuestro unico objetivo era cambiar dolares USA para movernos por Myanmar y enviar algun paquete por correo. Ademas, si KL es caotica Bangkok no lo es menos. Cambias los velos y burkas por tuk-tuks, las mezquitas por templos budistas y la basura en el suelo por ramilletes de flores e incienso de las ofrendas a Buda y ya estas en Bangkok. El resto es casi igual, desde los precios hasta el trafico, hay tiendas, puestos de comida callejera... Creo que nos estamos cansando de estas ciudades asiaticas y preferimos movernos por pequeños pueblos, cambiar gris del asfalto por el verde del campo y la montaña...

Y ya lo tenemos casi todo preparado para Myanmar. Casi, porque es dificil conseguir dolares USA en perfecto estado, como los quieren alli (no hay cajeros automaticos), pero poco a poco vamos aprendiendo como movernos por esta caotica ciudad a la que volveremos en unas tres semanas. Por cierto, no se si nos podremos conectar mucho a internet en Myanmar y el movil parece que no funcionara en este pais donde debido a la dictadura que sufren sus ciudadanos los paises "normales" (China no es normal) no invierten como medida de presion al gobierno local.

Ah, y supongo que mi nuevo peinado habra provocado alguna sonrisa que otra, no? El caso es que Flemming (un instructor de buceo y buen amigo) me dejo su maquina que solo corta el pelo super corto y a mi me parece que es lo mas comodo para moverse por aqui. Pero ya crecera...