De camino a Tonga nos quedamos por el camino

Todavia en el aeropuerto de Los Angeles fuimos al check-in para facturar las maletas y asegurarnos de que las enviaban a Tonga, ya que haciamos una escala de unas 2 horas en Fiji. El encargado de Quantas nos dijo que no las podia enviar a Tonga y las teniamos que recoger. Extrañados, le preguntamos el motivo y se fue a hablar con la que parecia su jefa. Al cabo de un momento en el que miraron alguna pantalla, nos dijeron muy amablemente que nuestro vuelo hacia Tonga salia 26 horas despues de aterrizar en Fiji. O sea, que haciamos una noche en Fiji! Uf! Si a veces el cambio horario entre paises es un poco lioso, el cambio de dia en Fiji y Tonga lo es mas. Y es que saliamos de L.A. el 15 de agosto a las 23:30 y despues de unas 10 horas de viaje llegabamos a Fiji a las 05:30 del 17 de agosto!!! Hemos perdido un dia en nuestras vidas! Nunca podremos saber que nos hubiera podido deparar el 16 de agosto de 2009 porque no lo hemos vivido... Que extraño, no?

Asi que pensando en si eso significa que somos un dia mas jovenes o un dia mas viejos, nos decidimos a buscar alojamiento una vez aterrizados en el pequeño aeropuerto de Nadi, en Fiji. Como llegamos de noche, no pudimos ver las islas del paraiso desde el aire. Nos alojamos en un lugar un poco alejado de la pequeña pero bulliciosa Nadi. Al lado de una playa tranquila, sin olas, con el horizonte plagado de pequeñas islas repletas de palmeras, hay una zona con un puñado de hotelitos a un precio razonable. Antes de ir al centro decidimos dar un paseo por la playita, y en un momento ya teniamos a un simpatico señor saludandonos y preguntandonos nuestros nombres y de donde somos. Nos ofrecio probar un par de cocos, a lo que accedimos sabiendo que algo nos cobraria, y estuvimos hablando con el un rato mientras bebiamos el agua de coco. Cuando le dijimos que cuanto le debiamos se hizo un poco el tonto y nos dijo que lo normal era darle unos 15 $ (de Fiji). Eso son 7,5 US$. Mas de 5 euros por 2 cocos! Uf! Este periplo en las islas del Pacifico empezaba un poco caro para nuestro exiguo presupuesto.

En Nadi nos dedicamos a pasear, ver el mercado, comprar sandalias para Andy (algo imposible de encontrar en toda America, incluido L.A.), comer algun curry en los chiringuitos indios (aqui viven muchos indios) y poco mas.

Al dia siguiente tempranito ibamos otra vez al aeropuerto para dirigirnos al fin a Tonga, donde nos esperaban un buen puñado de islas en las que ver a las grandes ballenas jorobadas que estan de paso por alli cada año de junio a noviembre. Ese era nuestro principal objetivo en Tonga y la razon por la que viajabamos a alli en Agosto.

Pues nada, en un mes estamos de nuevo en Fiji.